Despedidas
Van muchas.
María, Ricardo, Cata, Leti, Ana, Adri ... y más que faltan todavía.
Y creo que no he vivido el Erasmus tan intensamente como los demás. Bueno, cada uno a su manera, aunque me habría gustado aprovechar más algunas cosas.
Van muchas.
María, Ricardo, Cata, Leti, Ana, Adri ... y más que faltan todavía.
Y creo que no he vivido el Erasmus tan intensamente como los demás. Bueno, cada uno a su manera, aunque me habría gustado aprovechar más algunas cosas.
Publicado por Duendecillo a las 4:09 PM 0 comentarios
Etiquetas: Erasmus
El último fin de semana también estuvo bien, aunque un poco triste, de despedidas.
El jueves fue la fiesta de la música. Consiste en un montón de gente por la calle y grupos de música en cada esquina tocando cada uno lo que mejor se le da. Seguro que a Luci le mereció la pena cogerse el viernes de vacaciones, aunque los franceses deberían aprender de los municipios Andaluces y poner el día después como fiesta nacional: El día de resaca. En el trabajo todo el mundo estaba con una cara de sueño que se caía.
En principio estaba previsto ir a dar una vuelta con mi madre para ver la fiesta y luego quedarme yo más tiempo con los demás. Al final, la vuelta duró más de la cuenta y a la una no me apetecía ponerme a buscar a la gente, aunque debería haberlo hecho.
El viernes quise salir para compensar, pero estaba agotado. Me acosté a las 8 para dormir una pequeña siesta y me desperté a las 2 de la mañana.
El sábado estuvo mejor. De día paseos por el centro con mi madre y por la noche concierto y fiesta hasta las seis de la mañana con el resto de los erasmus. La última fiesta que vamos a hacer todos juntos aquí.
El domingo fuimos a la playa y por la noche a ver los fuegos artificiales. La odisea tuvo su enjundia. Queríamos ir a cenar antes, pero entre que encontrábamos un restaurante con plazas y que aceptara gente a horas tan intempestivas como las once de la noche, que empezaba a llover y que no nos convencía el restaurante que encontramos, al final acabamos por levantarnos los doce que íbamos e irnos corriendo sin pedir cuando empezamos a escuchar las primeras explosiones.
En cuanto a los fuegos, creo que son los más bonitos que he visto, aunque tampoco he visto muchos. De todas formas, aunque estéticamente fueran estupendos, hay otros de los que conservo mejor recuerdo. Está bien eso de no perderse después, aunque tampoco fue para tanto.
Después de los fuegos nos fuimos a cenar a los Quais. Como Silvia, la amiga de María que vino a visitarla desde Barcelona, es vegetariana, la cena consistió en una tabla de quesos y una botella de vino. Una cena estupenda con una compañía más estupenda todavía. Ni tan mal.
Publicado por Duendecillo a las 3:47 PM 0 comentarios
Ya está todo atado. El viernes 13 de julio cojo un vuelo para ir al Puerto de Santa María. Vuelta: el domingo.
Publicado por Duendecillo a las 3:46 PM 1 comentarios
Etiquetas: Aventuras y desventuras
¿Os acordáis de los exámenes que hice en Madrid? ¿Uno de bases de datos y otro de Inteligencia Artificial? ¡Pues los he aprobado ambos! ¡Solo me queda un examen y unas prácticas para acabar con mis asignaturas en la Politécnica!
Pues eso, que estoy contento, y que, como dice María: ¡Imaginación al Poder!
Un abrazo a todos
Publicado por Duendecillo a las 3:36 PM 6 comentarios
Etiquetas: Universidad
Pues eso, que Amable por fin ha dado señales de vida y ha mandado Fotos de su hijo recién estrenado.
Pues aquí están, en primicia para todos vosotros.
Un abrazo a todos y más enhorabuenas a Amable y Cristina, los afortunados padres de la criatura.
Publicado por Duendecillo a las 3:39 PM 4 comentarios
Etiquetas: Otras cosas
Hoy me he enterado de que tenemos entre nosotros un nuevo, como dirían Les Luthiers, ser pensante, casi podríamos decir, humano.
Amable es padre!
Aunque todavía no sé cuándo nació por que los cretinos de Madrid no avisaron con tiempo!
Desde aquí, Amable, mi más sincera enhorabuena! Muchos abrazos!
Publicado por Duendecillo a las 10:18 AM 0 comentarios
Etiquetas: Otras cosas
En este viaje se ha venido mi madre a pasar unos días en Bordeaux.
El viaje fue bien, salimos a las 3 de la mañana y llegamos a casa a las 10 de la mañana. Dejé allí a mi madre y luego al trabajo directamente.
Por la tarde, vuelta a casa cena y presentaciones y a dormir 12 horas seguidas.
El fin de semana fuimos a visitar la ciudad. En los quais había un velero de la armada Mexicana y lo visitamos por dentro.
Por la noche Raclette con Luci y Cata. Nos pusimos morados.
Ayer domingo fuimos a la costa. Primero fuimos a Andernos. Intentamos comer pero estos bárbaros de los franceses a las tres menos cuarto ya no te dejan sentarte a comer por que las cocinas están cerradas en los restaurantes. Por suerte encontramos uno en el que servían comida ininterrumpidamente y nos pusieron unas ostras. Bueno, ostras a mi madre que a mí no me hacen mucha gracia.
Luego nos fuimos a Lacanau. En la playa se estaba tan bien y el agua estaba a una temperatura tan buena que no tuve más remedio que bañarme con mi disfraz de Adán. En una parte alejada de la playa, por aquéllo de no exhibirse si no es necesario.
Luego de vuelta a casa otra vez, dando una vuelta para visitar Pauillac en coche.
Un día estupendo!
Publicado por Duendecillo a las 9:53 AM 2 comentarios
Etiquetas: Aventuras y desventuras
Este junio he hecho los exámenes de dos de las cuatro últimas asignaturas que me quedan para acabar, Bases de Datos e Inteligencia Artificial.
El examen de BD como siempre, he salido con buena impresión, pero habrá que ver el resultado.
El de IA ... bueno, hubo un pequeño percance. Dos días antes del exámen me enteré de que este año no dejaban apuntes. Pues bien, seguí repasando y fui al examen con pocas esperanzas. Pero al final conseguí responder a 8 puntos del examen. Toda una demostración de imaginación desbordante ... veremos los resultados.
Publicado por Duendecillo a las 4:38 PM 2 comentarios
Etiquetas: Aventuras y desventuras
El viernes pasado (8 de Junio de 2007) me fui a Ponferrada a la boda de Pablo!
El viaje, para no variar tuvo sus incidencias. Salí a las 17 del trabajo. A las 19 de Burdeos, había un atasco de mil demonios en la rocade.
El viaje fue bien hasta el País Vasco, pero allí mi estupendo TomTom me metió por una autopista que, como se ve aquí, todavía no han construído. Así que el tramo desde Mondragón a Vitoria tuve que hacerlo por carretera nacional. Detrás de un camión lentiiisimo que me hizo llegar una hora más tarde.
En Ponferrada me recibieron muy bien. Una cervecita y luego al Morticia, un bar muy especial. Tienen un futbolín con una alineación particular (1 3 3 4 si no me equivoco, Saúl corrígeme!), y una decoración muy trabajada. Silla eléctrica, niña del exorcista colgada en el techo, drácula ... si te tomas una cerveza allí no podrás dejar de admirar el decorado.
A la mañana siguiente, para sudar un poco las cervezas de la noche anterior y estar en forma para la boda, me fui a jugar un rato al baloncesto con César, el primo de Saúl. Me ganó, habrá que entrenar para la revancha.
Por la tarde boda. Alberto sabía ir, yo tenía mi GPS e, increíblemente, llegamos nosotros antes.
La ceremonia, como todas, vista con perspectiva desde la puerta de la iglesia.
La espera a que salieran la rellenamos con una estupenda guerra de Arroz de la que salí por mi propio pie.
Luego dejar el coche en el centro, para no tener que volver conduciendo. Un taxi y a la cena.
La cena no estuvo mal y después bailar y hacer un poco el tonto hasta altas horas de la noche.
El viaje de vuelta, Dani, Laura y yo en un coche y Chipi, Alberto, Carlos y María en el otro.
Y por fin en Madrid! A hacer exámenes!
Publicado por Duendecillo a las 12:50 PM 4 comentarios
Etiquetas: Aventuras y desventuras
Como todo se acaba, este fin de semana visitando a mi madre también llegó a su fin.
El fin de semana fue bien, vi a gente a la que tenía ganas de ver, y también, como siempre, me dejé mucha para otras ocasiones.
Mi madre está mejor, le sentó bien la visita. Ahora una quemadura un poco fea en el brazo y la sien mejorando gracias a un parche regenerador.
Una de las cosas más curiosas pasaron en el viaje de vuelta. Me volví a encontrar con Cristina de Zamora en el autobús, que volvía de su convalecencia en su tierra.
Salió de Burdeos hacia España 15 días antes pensando que tenía apendicitis, aunque al final sólo fue una infección. ¿Sólo? Bueno, dice que no sabe qué habría sido peor, por que la infección era de caballo.
Me encontré también con otro personaje que también conocí en un viaje Madrid-Bordeaux: Cristoff. Es un chico francés con novia de Ciudad Real. Nos conocimos cuando intentó hacerle una foto a su novia a través del cristal del autobús, yo estaba sentado atrás y al salir el flash salí también en la foto reflejado en la ventana. Luego le ofrecí mi móvil por que tenía problemas con el suyo y acabé recibiendo un mensaje de amor de su novia ... que no era para mí, snif.
Esta vez cenamos juntos en la pausa y le volví a dejar el móvil para escribir un mensaje. Al final volví a recibir un par de mensajes ... Hola xico del bus, por favor por favor podrías despertar a Cristoff para que sepa que ya no estoy sola? Qué bonito es el amor :)
Al llegar nos recogieron Jaime y Adri, y más tarde llevé a Jaime al aeropuerto. Como a las 6:30 no tenía mucho que hacer, decidí irme al trabajo.
Tan temprano llegué que no había nadie, y tenía que esperar a que pasara alguien para colarme, por que no llevaba el badge. Para hacer tiempo, me duché allí.
El resto del día, normal con poco trabajo.
Y esta noche ... a estudiar! que son dos días!
Publicado por Duendecillo a las 6:32 PM 2 comentarios
Etiquetas: Aventuras y desventuras